AL DUENDE DEL AMOR
Paso tiempo reclamando tu atención, te he llamado desde las colinas, desde los lugares que se que frecuentas, los nidos donde las parejas forman pactos y se prometen cosas que en el futuro, probablemente, no podrán cumplir. Espero verte pasar para decirte si es amor lo que siento, si a mis años pueden renacer los deseos de amar, pueden invadirme las ansias de sentir latir mi corazón, como cuando conocí a la primera mujer que fue conmigo de la mano, sintiendo palpitos entrecortados y con cosquilleos continuos en mi interior, que me mostraban que estaba enamorado, tan solo eso, y nada menos que eso.
No apareces, y me pregunto, si has desaparecido porque ni tú mismo crees en la imagen que debes reflejar. No te desafio, nada más lejos de mi intención, solo quiero que me des alguna prueba de tu existencia, no se pueden hacer demasiadas cosas en ese campo sin tu consentimiento, quiero ser conducido de nuevo a ese camino perdido, al lugar de mis sueños. Puede que pasara por alto tu presencia, puede que no tuviera encuenta esos sabios consejos que querías darme, si es así perdoname, no tomes en cuenta la estupidez que ha menudo embarga el ego de los hombres.
Estoy convencido de tu poder, del sentido de tu existencia, la necesidad que todos tenemos de usar esos maravillosos recursos tuyos para poder hacer que el amor sea ás que una palabra vacía de contenido. Te dibujan de maneras y formas diferentes, algunas irreverentes, y odio a quién bromea con asuntos y personajes tan serios. En consecuencia, y habida cuenta de que yo te aprecio, es más necesito de tu ayuda para volver a poder sonreirle a la vida, por favor aparece, preséntate en la forma que creas más conveniente, defenderé tus posturas y formulaciones.
Ayudame a ver si es cierto que todavia hay horizonte para mi, si puedo emocionarme cuando llegue a coger su mano, o ande de su brazo como cuando aquellos tiempos en los que las emociones me hicieron llorar de placer y júbilo. No me niegues tu atención, soy muy poca cosa, lo sé, pero también conozco lo que puedes llegar a hacer por mi y ¡agradecería tanto que le dieras a este viejo corazón la oportunidad de volver a creer en el amor...! solo con pensar en ello mis entrañas se llenan de pequeñas mariposas que me deleitan con su dulce aleteo.
Estoy seguro de saber de donde y porqué llega a invadirme esta sensación, solo necesito ahora, sin más dilación, que es gracias a ti que puedo volver a creer en el amor.
-------------------------