NADIE PUEDE DESCRIBIRTE MEJOR QUE YO CERECITA.

                                   NADIE PUEDE DESCRIBIRTE MEJOR QUE YO CERECITA.

No me importa que me tachen de remilgado, puede que otros cuando lean esto, digan que soy un melindroso, o un ñoño, hasta cursi. Lo acepto.

Sin embargo, no me cabe la menor duda de que nadie puede describirte mejor que yo.

Para mí, siempre eres y serás mi Cherry, esa cereza dulce y preciada que delicadamente espera en el árbol a madurar, para dar esplendor al paladar de cualquiera que aprecie una fruta exquisita.

Hay otras frutas jugosas y apetecibles, pero ninguna como tú. A otras frutas se las puede recoger más o menos maduras, más o menos turgentes y coloreadas, pero el color de tú delicada piel rojiza, ninguna de ellas la tiene.

Tú fortaleza es debida, a la suave brisa que te mece colgando del árbol, a la espera de su debido tiempo, tú paciencia. Esperas a que el sol la lluvia y el viento, cause el efecto deseado en ese característico aroma tuyo, al sabor dulce y delicado cuando caes en la boca de alguien.

Nadie puede despreciarte, las ramitas que remecidas crecen al amparo unas de otras, dan ese aire atractivo a la fruta que para mí, es la más deseada.

Mi queridísima Cherry, ¡como envidian las demás frutas tú delicadeza…!, quisieran ser tú pero no pueden, se las puede comparar a mil frutas diferentes, pero ninguna como tú, amor.

Amor exquisito, porque lo siento, adoro cada cosa que haces, cada respiración tuya te hace crecer, y yo, pobre de mí, te miro y pienso… “Que nombre más virtuoso le puse a mi mujer, nombre de reina de las frutas”.

Perdóname por tanto alago, no puedo expresarme de otro modo, un botánico seguramente lo haría mejor que yo. Sin embargo, sabes que es cierto, que a ti te conozco mucho más de lo que muchos pudieran imaginar.

De ahí ese atrevimiento mío, que nadie, puede describirte mejor que yo.

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