INSPECCIÓN OFICIAL

                                                       INSPECCIÓN OFICIAL

Ha llegado el día y la hora de que un señor, médico de profesión, me analice con el fin de saber si estoy lo suficientemente cuerdo, en condiciones, para declarar en un juicio que alguien tiene contra mí. No es cosa valadí pasar por esta prueba, no estoy en condiciones jamás, de poder entender las preguntas que me han hecho sicólogos, neurólogos y otras autoridades de la medicina,
El asunto es que, estoy constantemente bajo el influjo de pastillas que forman parte de un coktel tóxico con el que algunos médicos están de acuerdo, mientras que otros opinan, que no es posible la curación de mi cerebro a base de barbitúricos. He llegado a tomar a lo largo de los años, cantidades industriales, con absoluta rigurosidad eso sí, pero el último neurólogo que me visitó en la provincia de Tarragona, se hechó las manos a la cabeza, cuando vio que estaba medio intoxicado por causa de la clase de mdicación que tomaba.
No es posible dijo, estos medicamentos chocan entre si, tienen que causarte un efecto tremendo dentro de la cabeza, vamos a sustituirlos por otros quesean compatibles. No supe que decir cuando me soltó aquel susto, porque te asustasde cojones cuando ves que te has estado tomando trece años una medicación que no te ha servido más que para joderte el organismo. Las cápsulas y pastillas de todo tipo, dieciocho al día, no solo causan efectos en la cabeza, las tienes que digerir de algún modo, si no son la adecuadas te fastidian el estómago, el hígado o los riñones, ¡con lo bien que meaba antes de tomar toda esta combinación de venenos multinacionales!
Esta es otra, los médicos compran o recomiendan, dile como quieras, lo que les venden los laboratorios que mejores vendedores tienen, esto salta a la vista, tienen buenas comisiones y muy buenos regalos, que tienen bien presentes a la hora de vender sus productos. ¿Cómo funcionan estos fármacos?, ya se verá cuando los enfermos lleguen a la consulta de nuevo, aquejados de migrañas, o dolores de huesos que antes no tenían. Al fin de cuentas, los enfermos son los conejillos de indias, con los que todo el mundo experimenta. Si la palamas porque que te da un jamacuco, pues que se le va a hacer... se le entierra y listos.
Mi caso es diferente, hoy me debo enfrentar al criterio de un forense, que debe decidir si tengo que ir a ochocientos kilómetros de mi actual casa, para declarar delante de un juez, una señora dice que cuando le hacía masajes le metí mano, que se le va a hacer... quiero pensar que sin pruevas no hay sentencia condenatoria, pero como hoy no hace falta demasiado para que lo metan a uno en la sombra una temporada... ya veremos. De momento tengo que pasar el examen, luego ya veremos qué pasa.
Una cosa os digo, si este asunto sale bien, os mantendré informados, y si me exoneran de este presunto delito, os invito a un cochinillo al horno, pero eso sí, tendreis que venir a León que es donde vivo ahora.

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