RETRATOS POPULARES
Antes,
me refiero a hace años atrás, los personajes populares estaban más que
justificados, algunos grandes artistas, otros escritores o cineastas. Gentes
con talento, hasta algunos de ellos, personajes que jamás han pasado de moda y
han servido para enseñar a gente joven, en escuelas superiores o universidades.
Y debo añadir que no solo han sido personas de origen nacional, de hecho,
muchos de ellos son, personajes extranjeros, que han llegado a ser universales.
¡Que
pena, que impudicia, que mala leche, cuanto egoísmo y mala leche tienen algunos…!
Bueno, si solo fueran unos cuantos…, lo peor de todo es que hay una tremenda
mayoría de personas, que miran hacia otro lado cuando suceden determinadas
cosas, que no son más que motivo de vergüenza y de ignorancia mundial.
Mogollón
de personas que se llevan la pasta fura del país sin conciencia, decenas de
estadistas que miran hacia otro lado mientras se llevan a ves a saber tú donde,
a personas a las que engañaron de forma anticipada para decirles que no se
preocuparan, que huyeran de la guerra, que ellos los protegerían y les darían
asilo para abrirles nuevas esperanzas en el futuro. Unos miles aquí, otros
miles allí, tantos millones de euros para financiar la operación, euros que al
final se diluyen en el espacio de ve a saber tú que galaxia. Galaxias que
además ni se sabe que existen, no constan en ningún sistema solar, solo conocen
la dirección y la forma de viajar a estos lugares, los interesados, los
defraudadores y los ladrones de guante blanco.
¡Cómo
se retratan esos hijos de su madre…! Y el caso es que son la gente más popular
que alguien pudiera imaginar. “¡Yoooo, no tenía ni idea de lo que estaba
pasando, esas cosas las lleva mi representante, soy inocente!” Mientras, otros
preguntan… “¿Oiga donde nos llevan…?” “Nada no se preocupen, van a estar en un
lugar donde se atan los perros con longanizas?” Y así va funcionando el sistema
de esos retratados populares. Los estadios de fútbol se llenan, los clubes van
engrosando la lista de socios, y los demás… durmiendo en barracones con mierda
hasta las cejas y con las falsas promesas, de que serán personas dignas, que
los que tienen aptitudes, pueden llegar a ser ingenieros, técnicos en
telecomunicaciones, maestros de universidad, que es lo que eran antes de que
les empezaran a llover las bombas desde los cielos.
¿Qué
quienes ganan con todas estas maniobras…? Nadie lo sabe, tampoco se sabe
quienes son los que pierden, esas cifras siempre tienen tendencia a ser
alteradas, las estadísticas están hechas para eso, para maquillarlas, para
disfrazarlas, para engañar a los más desfavorecidos.
Lo
peor de todo este asunto es, que todos, absolutamente todos, de un modo u otro,
somos afectados por estas circunstancias que tienen como resultado… el interés
y el desgaste, la impotencia, o la indiferencia, los que prefieren ser testigos
mudos de esta barbarie mundial.
Retratos
populares de lo que se exige que seamos, no podemos ser personas diferentes a
eso, estro está claro.
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