viernes, 1 de enero de 2016

LAMENTOS Y DESCONTENTOS

                                                       LAMENTOS Y DESCONTENTOS

-Tú cuanto cobras de jubilación nene…
-¿Por qué lo quieres saber, cobro lo que tengo que cobrar? Las jubilaciones se cobran a tenor de lo trabajado a lo largo de tu vida.
-Míralo el listo, eso ya lo sé yo. Te lo pregunto por simple curiosidad, somos amigos tío, no voy a ir por ahí diciendo lo que cobras…
-Pues razón de más para que no lo sepas. ¿De qué te va a servir, para hacer comparaciones con lo que te pagan a ti? Lo que a mí particularmente me preocupa es, que mis nietos no van siquiera a poder cobrar una pensión digna.
-Cierto, eso también lo pienso, yo que tengo un nieto con edad para entrar en la universidad, lo he pensado más de una vez, ¡pobrecillo… ese va a ser un médico barrendero! Ves, mi nieta sin embargo, parece que sin carrera alguna no va a pasar apuros, una amiga la ha metido de puta de lujo, oye, que la muy zorra gana una pasta que te cagas. Sin oficio ni estudios, para eso no hace falta, solo es necesario tener un buen cuerpo y ser simpática, y mi nieta Feli en este aspecto es lo más.
De todos modos, ambos reconocen que el tema de las jubilaciones, no es asunto fácil de tratar, cuesta digerir que un presidente de banca se jubile con sesenta mil euros al mes, hasta que la espiche, mientras que otros que han trabajado mucho más que esos barrigudos estafadores, están recibiendo el más absoluto de los desprecios por parte de los bancos, y terminan cobrando después de treinta años de trabajo en la institución, mil doscientos euros brutos. Les hacen una fiesta de despedida y le regalan un reloj de oro que difícilmente se lo pondrá, por miedo a que se lo roben.
¿Quién sabe a qué epígrafes se refieren para darle a un miembro más o menos importancia…? Solo lo saben determinados personajes de las alturas, de las cúpulas de la administración a quienes recomiendan o no para que sean más o menos considerados con ellos. La infame muestra de la desigualdad social que muchos políticos desean terminar, y que al final no pueden llevar a cabo, porque otras voces les rezan al oído que esto no les conviene hacerlo de esta forma. Podrían llevar a cabo una reforma revolucionaria que afectara a todo el mundo, y eso no sería bueno ni siquiera para gente de su propio partido.
Ahora comienza a quedar un poco más claro, las razones de algunos que no les conviene decir a otros, las rentas que reciben cada mes como jubilación. Sea como sea, el desequilibrio entre estas rentas vitalicias algunas veces son abismales, y dicho sea de paso, injustas, muchas de estas rentas millonarias podrían llenar el país de trabajo y desarrollo. Pero no, prefieren acumular para que el futuro sus ataúdes, en el  caso de muerte, puedan tener un buen forro combustible, los billetes de sus posesiones.
Mientras, las familias como a las que hacíamos referencia al principio, van bailando al son que tocan los demás, esperando y desesperando, resistiendo pero sin embargo cada vez más debilitados, con el propósito de engordar los que están en lugares prominentes, viviendo de ellos no para ellos, sin querer saber lo que significa el altruismo, la bondad, la compasión. Se limitan a pensar…y a tener esto como un credo, las oportunidades están abiertas a todo el mundo, que cada cual busque el modo de integrarse en la sociedad, ésta es grande y está llena de oportunidades.

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