sábado, 23 de enero de 2016

NO ME PREOCUPA NADA

                                                         NO ME PREOCUPA NADA

Había en una ocasión unos cuantos que me querían joder a toda costa, y hasta puedo decir que me metieron el miedo en el cuerpo; al poco, con el paso del tiempo me fui informando de asuntos relacionados con las leyes, lo que sancionan y cómo lo hacen, comencé a respirar un poco más tranquilo. Salvo a aquellos que no tenía penas pendientes por grandes robos o asesinatos, la ley parecía que no tenía demasiado interés meter más gente en la cárcel.
Sanciones económicas y poco, más es lo que les cae a estos “condenados”, no digo yo que me sobre el dinero para pagar a abogados y procuradores, al fin y al cabo ellos son los que te sacan del mejor modo posible de los entuertos a penas que puedan caer sobre uno. Bien, pues aunque parezca mentira por razón de un cruce de papeles, servidor ha tenido dos juicios el mismo día, a la misma hora uno en cada punto de nuestra geografía. ¿Qué cómo ha sido eso…? Ya no importa especificar lo que pasó, el caso es que ya ha pasado.
No me han condenado a cumplir prisión, la pena no llega los dos años, y siendo este el caso, no hay manera de que me metan en un penitenciario. ¡si vierais como están las cárceles… dan espanto del hacinamiento que allí existe! Consecuencia directa de estos delitos leves… el pago de una multa que tú puedes dosificar en razón de los gastos que tengas y la entrada de dinero que te llegue.
A servidor le han estado tocando las narices todo lo que han podido, hasta el día del juicio iban unas cuantas personas a mentir, a prestar falso testimonio, pero el juez no se dejó engañar y no le permitió a la defensa que estuvieran en la sala más que la fiscal, mi abogada que ya había pactado con ella y el señor juez, nadie más.
Si por contar mentiras y falsos testimonios hubiera tenido que ir a prisión lo habría aceptado; “Te has meado fuera del tiesto nene, a pringarla” Pero el ajustarse el pago de la multa a mis situación y haberse demorado este juicio seis años y medio, me sirvió de atenuante, también tuvo presente el juez mi estado de salud, una enfermedad degenerativa que terminará por secarme las neuronas.
Pero ese no es el caso ahora, de momento, pretendo disfrutar de la vida cada instante que me quede de ella, cuando me quede colgado como un higo seco de una higuera de la que se ha hecho ya toda la cosecha, ya veremos, de momento hay que resistir como buenamente se pueda. De forma que es fácil comprender el porqué de este tema, hoy por hoy, no me preocupa nada.


                                                                 --------------------------

No hay comentarios:

Publicar un comentario