domingo, 17 de enero de 2016

QUE DIVERTIDOS...

                                                                   QUE DIVERTIDOS…

Un político solitario es como un playmovil sentado o de pie, esperando no se sabe qué, debajo de una farola. Ahora bien, si te quieres divertir de verdad, vacía la caja de todos los que tienes, comienzas a cambiarles partes del cuerpo, el color del cabello, les pones con falda o pantalón y comienzas a inventarte una historieta con ellos. Por ejemplo, te imaginas que están todos en la puerta de un parlamento, se saludan, se dan abrazos y después se van sentando en los diferentes asientos del parlamento.
Como la imaginación es libre, y los playmovil los hay de todos los tipos y vestimentas, puedes poner a uno de ellos presidiendo el parlamento vestido de Cesar, a los lados dos hombres vestidos de policías, mejor un hombre y una mujer, por eso de la igualdad de oportunidades. En los diferentes escaños a unos los veinte, si es que tienes muchos, vestidos de bomberos, más arriba a unos cuantos indios, sin caballos claro, los caballos no pueden entrar en las cortes. Más arriba a otros que son minoría, de vikingos. Ahora miras con cierta satisfacción tu obra y te das cuenta que has hecho una oposición de lo más variopinta, divertida, te aplaudes a ti mismo de lo bien que lo has hecho.
Pero ahora te queda construir en la otra mitad, los que se sientan en las sillas azules, a los que gobiernan. Nos queda la mitad del hemiciclo por rellenar, se supone que estos, los que gobiernan son más dignos, tienen que llevar mejores ropas, un atavío completamente diferente de los otros. Nos ponemos a pensar y pensar hasta que se nos enciende la luz sobre la cabeza, ya está, estos serán todos soldados de la unión, del 7º de caballería, todos ellos de azul con algún que otro soldado renegado, que estos visten de gris y con fajín, no muchos para que los otros no se den cuenta. Lástima que no haya ninguna mujer dando de mamar a un niño, molaría ponerla también para diversificar el paisaje.
Pero en conjunto aunque nos haya costado lo hemos hecho bien, ¡que gozo hacen todos ahí sentaditos y callados! Ahora vamos a montar unas elecciones, en los colegios electorales hay de todo, amas de casa, parados, cualquier persona que sea mayor de edad, que no esté muy jodido de otro modo tendríamos que poner en las mesas a enfermos con camillas y enfermeras controlando el goteo. Se acaban las elecciones y la gente, es decir los partidos políticos, unos y otros se atribuyen la victoria. Hablan unos con otros y otros con los de más allá, hay que formar una mayoría que pueda gobernar el país de un modo razonablemente bien, a ser posible. Charlas en la televisión hablan de intrusismo, de traición, de unas exigencias de algunos partidos que no se pueden tolerar.
¡Qué divertidos son los políticos sirviendo de juguetes a todo el mundo! Que nadie crea que les gusta a todo el mundo verlos así, otros están en sus diferentes sedes del partido celebrando que han ganado, ¡¡¡Una mierda para vosotros…!!! Tienen que venir los antidisturbios y poner paz a pelotazo limpio y golpes de porra. ¿Os imagináis este escenario con todos los playmovil en el escenario? Como una tragedia griega, estos magníficos juguetes de origen alemán, nos han servido para poder pasar la tarde absortos en una ficción, pero que es una realidad palpable. Oye, después de esta diversión uno ni piensa en ir a votar las próximas elecciones, ¿para qué si uno ya sabe con anterioridad cual va a ser la consecuencia de todo este meneo?
Y no es que lo sepamos por habladurías de fuera, lo sabemos por nuestros fantásticos muñequitos transformables que nos han dado una idea exacta de lo que es la realidad.

                                                              ----------------------------


No hay comentarios:

Publicar un comentario