UNA SOMBRA
PERMANENTE
Siempre
mirando hacia los lados, delante te veo mientras camino, detrás de mi espalda
cuando vuelvo la cabeza. Eres tú, y yo, contigo, dentro del mismo mundo incierto,
dibujando con diferentes colores, las mismas siluetas las mismas caras los
mismos perfiles.
Se
me antoja seguirte pero no me dejas, solo dejas que esté cerca de ti solo eso,
pero es poco para mí, sabes muy bien que me perteneces lo mismo que yo a ti.
Voy en constante inquietud, caminando con esa sombra permanente, tú y tus
risas, tú y tus penas, tú y tus enfados, tú y sus consecuencias.
Llegas
y me besas, no me alivian esos besos, porque siempre los llevo conmigo, siempre,
como tú sombra, me abruman y desesperan. ¿Qué podría hacer para quitarte de encima
de mí, para que no sigamos reflejándonos el uno al otro?
Llevo
mucho suspirando, llorando una pena indefinida pero alegre por saberte viva, te
siento, luego sigues ahí a mi lado, encima, detrás de mis pasos. Se me quiebra
el pensamiento cuando me encanto pensando en ti, anochece en mi corazón cuando
de pronto no te siento, siempre es cuando me duermo.
Temo
no despertar y verte de nuevo, sentirte, olerte, suspirar, reír. Ligera cómo
una pluma caminas, por eso te veo siempre cerca de mí, es por eso que se
enciende de nuevo la luz de mi alma, resucito de noche aún, y ya siento tu
sombra. El amor se me ha olvidado, no así la luz del cariño entrañable que
siempre he sentido por ti, besos amables, esos sí que los considero, los siento
como el rocío de la madrugada de esos inviernos fríos que sacian de vida los
valles.
Trato
de ser sincero, te quiero, pero si sigues a mi lado o tras mí sombra caminas,
corres riesgos innecesarios. El camino que comienzo puede que te parezca cruel,
desalmado, innecesario, nada más lejos de eso, me voy para no tenerte delante
ni detrás, más bien lejos prefiero, antes de que sienta desde cerca. esa
horrible distancia que nos separa.
Una
máscara de presuntas voluntades movida por una maquinaria ciega, cerrada en un
caparazón transparente, se hace patente cómo y porqué se mueve. Esas sombras
que me acompañaban siempre ahora son cristales que me apuñalan, atraviesan el
corazón y desangran el ánimo de vivir que tengo cerca de ti.
-.-.-.-.-.-.-.-.-
No hay comentarios:
Publicar un comentario