lunes, 24 de agosto de 2015

EXPIACIÓN

                                                                EXPIACIÓN

¿De qué forma puede expiarse un pecado? Primero habría que averiguar lo que significa la palabra pecado. Se ha usado el pecado más en relación con la religión, que con cualquier otro asunto que despierte el estado de culpa de la gente. Se han impuesto grandes penitencias por pecar, se ha ejecutado a miles,  hasta a cientos de miles de personas, por no admitir que lo que han hecho, es un pecado.
¿Qué es pecar? Sobre esta base podemos entender, averiguar la forma retorcida con la que muchos han usado este vocablo para atemorizar a la gente, lo mismo que con el infierno, la condenación eterna, estar quemándote por toda la eternidad por los pecados cometidos. Al margen de la excepción de los benjamitas, tribu judía cuyos hombres entrenados para la guerra, eran capaces de disparar con  sus ondas a un cabello sin fallar, de quienes se decía cuando fallaban que habían pecado, en otros ámbitos, el sentimiento de culpa por algo hecho contra otra persona, sin su consentimiento se considera un pecado, un castigo punible que a menudo se pagaba en tribus remotas, incluso en algunas naciones actuales está establecido por ley, que hay algunos pecados, como el adulterio que se castigan con el apedreamiento de las adúlteras.
Pecamos cuando no decimos la verdad, no sabemos a ciencia cierta, hasta qué punto puede llegar la mentira que hemos lanzado, salvamos momentáneamente nuestra dignidad exterior, sin darnos cuenta, que esa mentira, puede comprometer la integridad de otros, extender la difamación y terminar por caer sobre nuestra propia cabeza, esa mentira que no deja de ser un pecado. Cuidar no solo lo que hacemos, sino también lo que decimos, y a quienes elegimos para hacerlo, es la clave para poder definir, lo que es el pecado.
Desafortunadamente, estos pecadillos, están a la orden del día, digo pecadillos porque de hecho la mayoría no pasan de aquí, terminan con una discusión casera o entre amigos, que de alguna forma se sienten engañados, lo sangrante es, que entre la palabra conciencia y consciencia, solo hay una consonante que las separa, y es importante, tan importante que la mayoría no vemos la diferencia, la S, una consonante tan válida que separa la mentira de la verdad, de forma total.
¡Cuidado…! Algunas veces uno puede pasarse toda la vida expiando estos pecados, y casi sin darse cuenta, es decir de forma inconsciente, vagar por la vida como un alma en pena, algunos los llaman fantasmas.


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