CAPARAZÓN DE TORTUGA
Ella
va arrastrando su pesada carga sin pensar que con el tiempo va creciendo, que
se va reforzando y en consecuencia, cada vez se mueve con mayor dificultad.
Pero la tortuga, que es en definitiva al animal a quién nos referimos, con ese
caparazón, que no deja de ser una coraza más fuerte de lo que comúnmente se
cree, no tiene apenas depredadores. Sus placas o escamas, según la opinión de
diferentes científicos, van creciendo progresivamente, eso las hace más lentas
con el tiempo menos vulnerables a los ataques de grandes mamíferos como los
leones.
Nosotros
los seres humanos, no tenemos caparazón, pero eso es solo en apariencia, con el
paso de los años, nos hacemos más duros, y como quiera que sea que hayamos
pasado por experiencias de un calado extremo, ni te cuento. Eso es bueno en
determinados ámbitos, pero en contrapartida, es posible también, que seamos más
recelosos, conforme crece nuestra coraza huimos de los problemas, de las
situaciones comprometidas. Igual que las tortugas, cuando vemos a una manada de
ñus que llegan galopando en busca de pastos frescos, nos paramos a verlas
pasar, con cabeza y patas, recogidas dentro de nuestra coraza.
Siempre
hay involuciones dentro de las familias, y en determinados momentos, nuestra
mente podría colapsarse y hacer o decir, algo fuera de tono. Nos retraemos y
dejamos mientras tanto, que nuestra coraza se vaya reforzando, fortaleciendo
hasta que podamos tomar una decisión sensata. Esto no significa que pasemos de
los problemas, hay quién sabe reaccionar mejor ante determinadas acciones,
otros somos un poco más lerdos en asimilar los acontecimientos.
Mejor
es pues, dejar que un poco más de tiempo usado en reflexionar, nos ayude a
decidir, que hacer y cómo hacerlo, pero eso no significa que olvidemos lo que
ha pasado y nos ausentemos del asunto. Así pasa el tiempo… dejando que el este
sea nuestro aliado, mientras que por otra parte, las escamas de nuestra coraza
se haga más fuerte. No se puede olvidar que, dejar un problema para mañana,
puede ser un problema sin solución, de manera que hay que seguir andando, poco
a poco pero siempre adelante.
Este
animal, aparentemente inútil y poco considerado como es la tortuga, tiene en
este aspecto, muchas cosas que enseñarnos.
--------------------------------
No hay comentarios:
Publicar un comentario