RIO DE LAVA
Tormentas rojas salen de las entrañas, rayos que asustan y
tambalean, que desmayan la razón.
Van más allá del pensamiento racional, sé porque suceden,
cómo arrasan, la fuerza que desarrollan, mientras mi corazón se encoje de miedo.
Veo con admiración tu tardío despertar, espero pacientemente
alguna señal indicativa de tu actividad, es inútil, nunca me avisas, llegas con
un rugido extraño, inexplicable, cuando quiero darme cuenta, columnas
piroplásticas inundan mi escenario, todo se vuelve negro, espeso, se podría
cortar con un cuchillo la erupción de tu abrazo.
Miro a mi alrededor, sigo girando, la Tierra no se detiene,
gracias por eso, te quiero, adivino que me amas, ahora ya, con calma,
reflexiono, pienso y deduzco, que sin ti no soy nada. ¡Agradezco tanto que escuches
mi llamada…!, me apasiono al ver cómo te estremeces, que en este cuerpo macizo
tuyo, se hacen inminentes otras señales, que anuncian otros ríos de lava
hirviente.
Sigo tus rastros, te estudio, analizo tus fuentes, y en
ellas me pierdo cuando quiero adentrarme en tú corazón caliente. Me ensucio, me
quemo pero ¿Qué más da, si sé que lo haces por amor? Desde un confín de tú alma,
al extremo más lejano de tú inmenso cuerpo, eres un todo, unida por la armonía
de la gran sinfonía que el espacio domina, la inmensidad del universo.
Quiero seguir siendo tuyo, si fuere necesario, servirte de
alimento amor puro. ¡Cuántas onomatopeyas no he tratado de inventar para
imitarte!, todas fallidas…, todas han sido un desastre, nada ni nadie puede
imitar tu sonido, tus quejidos y ruidos, que bien pudieran ser lamentos del
interior de tus entrañas vivas.
Te quiero porque siempre me sorprendes, tienes mi alma en
vilo siempre, me alimenta esperarte, escuchar sin prisas tú llegada, siempre es
inesperada, siempre calurosa, ni tardía ni temprana.
Unas veces localizada en un solo lugar, otras, todo tu
entorno se sacude con tu solo respirar. ¿A quién puedo amar más y mejor que a
ti? Te espero siempre atento, vives en la luz y yo en las tinieblas de la
Tierra que solo iluminas tú cuando respiras y me quemas con tu aliento.
Hace mucho que espero, sal de esa luz entrañable y feliz, funde
mi alma con esos calurosos besos, que guardas en el interior de esa alma tuya.
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