sábado, 2 de julio de 2016

CADA COSA EN SU LUGAR...

                                                          CADA COSA EN SU LUGAR…

En todos los lugares del mundo hay determinado orden, y ese orden debe de mantenerse con el fin de que haya progreso, estructuras bien consolidadas que nos ayuden a encontrar nuestro lugar en el planeta. Hay a quién no le interesa para nada que haya un orden concreto, esa es la razón del porqué se organizan guerras que afectan a los que ya tienen las cosas fuera de lugar.
No es nuestro caso pero podría llegar a serlo, y si así fuera, entenderíamos el sufrimiento que causa el que determinadas cosa estén fuera de sitio. Tengo familia, y por nada del mundo, desearía que estuvieran vagando dentro de un mundo lleno de locos, que solo piensan en deshacer aquello que ya tiene su lugar establecido. Pues al margen de esta pequeña reflexión, hay quién piensa que sí, que no todo debe de estar en su lugar, que hay cosas que deben estar fuera de los estantes de la sociedad, para poder justificar sus asquerosas acciones, botes y botellas que han de estar tiradas por los suelos.
Si fuera todo ordenado y bien establecido no habría forma de que la gente peleara por causa de las enfermedades, de las guerras, de fronteras que no deberían existir. Las cosas no están en su lugar, porque hay un sinfín de gente a la que le sacan beneficio de esta impostura, yo diría que la mitad de las cosas que nos rodean están fuera de lugar para que no pensemos en lo bien que estarían bien colocadas en sus estantes, los cuadros colgados en las paredes oportunas sin que nadie tuviera que andar vigilando para que nadie se los llevara.
Lo que otros hicieron lo hicieron para el bien común, para que todos nos beneficiáramos de estas maravillas, sean estas naturales o bien pictóricas por ejemplo. Las cosas que están en su lugar, no necesitan que nadie dirija sus vidas, todo está oportunamente señalizado, hasta las calles por las que tenemos que pasar y cuando hacerlo. Creo que a nadie le gustaría que le pasara algo así y sin embargo pasa. Pasa en los semáforos lo mismo que pasa en las mil cosas habituales que hacemos en la vida.
En la cuestión dedicada al sexo, es lo mismo, cuando a él le apetece tener relaciones con la mujer la tiene, si es al contrario ¡cuidado! La mujer puede resultar una ninfómana o una buscona, todo tiene su lado claro y su lado oscuro, y es precisamente el oscuro, en el que siempre ponemos más atención. Hay que ser un poco más listo y definir las posturas, que van a determinar, si estamos poniendo las cosas en su lugar.

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