DALE DURO
En las competiciones de boxeo los
entrenadores, antes de la pelea se informan de cuáles son los puntos débiles
del contrincante, los que pelean, los boxeadores echan mano de estos recursos,
saben que si siguen estas indicaciones tienen más posibilidades de ganar la
pelea.
Los seres humanos al margen de
que seamos o no boxeadores, nos enfrentamos a la misma cuestión aunque en otros
términos. Debemos ganarle la pelea a la vida, ella nos enseña que la naturaleza
humana es la de vivir, no estamos hechos para morir y los investigadores lo
saben, estudian y trabajan con este único fin, conseguir que vivamos lo máximo
posible, aunque lo cierto es que no está en nuestra mano llevarlo a cabo. Hay
demasiados escollos en el camino, para poder conseguir la inmortalidad, o la vida
eterna.
Una de las cosas que hacen que
muramos de forma más deprisa, es todo aquello que comemos y bebemos, eso es una
realidad incuestionable. Ya pueden ser veganos los que lleven un régimen de
austeridad absoluta, comer de forma absoluta natural, todo esto es natural y
cierto, pero dentro de nuestro cuerpo, corren pequeños bichos que luchan por
devorarnos, también quieren comer, y comen, comen hasta el punto de dejarte sin
defensas, por mucho que uno conozca los puntos débiles del enemigo, como el
boxeador que sabe todos los trucos que debe poner en práctica para poder vencer
en la pelea.
No depende de nosotros el ganar o
perder esta batalla que además es a muerte, depende de determinadas
circunstancias que escapan a la razón de las cosas. Eso no significa que cuando
uno está en una situación depauperada, extrema. Que comienza ver el final del
túnel, el fin de su camino, haya que rendirse, eso jamás. Puedes pasar por operaciones,
por pruebas que son de lo más desagradable que uno pueda imaginar, pero siempre
hay que seguir peleando, nos queda un suspiro de vida, aprovechémoslo para dar
gracias por estar vivos, por tener un suspiro en nuestros corazones que nos
indiquen que todavía estamos vivos, que la vida e cara y la muerte ha de ser
cara lo mismo que la vida.
Demos gracias a que desde el
rincón, alguien nos dice qué tenemos que hacer y cómo, si llega el momento de
arrojar la toalla porque estamos en una situación desesperada, sigamos luchando
la vida no se termina con una pelea, tenemos otras muchas oportunidades para demostrar
hasta el final que hemos vencido.
Si llega la hora de colgar los
guantes… ya sabemos lo que esto significa, senos da el descanso que durante
mucho tiempo hemos merecido. La muerte es un dibujo de lo que en realidad es la
vida, por lo tanto es necesario verla así, no con miedo o temores infundados,
los médicos hoy, no te dejan sufrir hasta el punto de no poder aguantar más de
lo necesario.
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