SIENTO MUCHO NO SENTIR.

                             SIENTO MUCHO NO SENTIR

Lo siento, si, sé que no es bueno, que el motivo principal para estar vivo es sentir, sentir placer y dolor, para esto estamos hechos. Y en cambio, paso cerca de los lugares donde estos sentimientos deberían ser más fuertes, y no siento nada.

Es como si una gran máquina del tiempo, hubiera borrado de mi memoria, los pasajes más oscuros, los que duelen demasiado, los que te anclan a una silla, y te mantienen llorando todo el tiempo sin saber hacer otra cosa más que eso, lamentarte caminando entre sombras, entre fantasmas de diversas índoles, de diferentes épocas y colores.

El tiempo que pasé siendo un auténtico hombre, lo pasé feliz, ignorantemente feliz, ojos que no ven corazón que no siente. La ignorancia de determinadas cosas que suceden a tu alrededor, si no eres consciente que pasan, es decir, que no sabes que eres el protagonista, producen felicidad, la vida sigue, todo pasa a determinada velocidad ante tu vista.

Lo malo de todo esto, es, que por el motivo que sea, caiga la venda de los ojos, puede ocurrir de muy diferentes maneras, en cualquier caso, cuando eso pasa, comienzas a dejar de sentir, a dejar de vivir del modo que deseabas continuar haciéndolo. Pero nadie puede obligar al tiempo a marcar las pautas que uno desea, él marca todo el esquema de nuestros pasos, desde la cuna a la tumba.

Creo estoy dejando de sentir, y lo siento mucho, nada de lo que hay a mi alrededor, tiene el efecto que tenía hace unos cuantos años atrás, quisiera que fuera de otro modo, pero lo siento, no puedo.

Me interesa la vida, sin duda alguna, pero de otra forma, de otra manera, sin interesarme nadie, sin motivos para amar a nadie, sin razones para desgastarme por ser humano alguno. ¿Será que el egoísmo se ha apoderado de mí? ¿Será posible que sea, que me doy cuenta que no le intereso a nadie? Bueno, si así fuera, me gustaría que los afectados me lo hicieran saber, pero, creo que la gente, no quiere complicaciones, seguramente que muchos, están pasando por sus propios cismas, y no tienen tiempo para dar explicaciones a los demás.

De cualquier manera, es muy jodido sentir que uno ya no siente, vives porque te aferras a la vida, es lo único que tienes, es lo único cierto, lo interesante, la mente siempre galopa hacia objetivos que ha menudo son quimeras, pero galopa, eso es lo bueno, sigues teniendo fuerzas para hacer o decir algo, lo que sea. Prefiero que nadie me tenga en el punto de mira, eso casi nunca es bueno, ser el objetivo de alguien que ni siquiera te quiere, es doblemente perjudicial.

Un camarada de fatigas –eso es solo una forma de expresarme, pero sin querer hacerme la víctima-, me dijo un día, que las personas, ha menudo convivimos con otros, por puro costumbrismo, porque ambos disfrutamos de las mismas aficiones, de la misma casa, del mismo plato diario, hasta de los mismos amigos. Pero que él creía, que no somos lo suficientemente valientes, como para hablar sinceramente del tema, con las personas, con las que compartimos nuestras vidas. Suscribo lo que piensa, es una persona que no tiene dobleces, que no es rebuscado ni insincero, vale la pena escucharlo y sacar conclusiones de lo que dice. El también se ha pasado más de media vida teniendo que disimular afectos, disimular inconscientemente, que no es que deseara ser una persona vil ni malvada, sencillamente, no se había dado cuenta de lo que pasaba a su alrededor.

También puede ser que estuviera equivocado, en este caso yo también lo estoy, pero de cualquier forma, lo importante es que al final dejas de sentir, ya no te conmueve nada, alguna cosa puntual que vivas, una desgracia de alguien que conozcas, una tragedia que ves en televisión, pero nada más, el resto, es un relleno, un algo que hace que sientas un poco de alegría, desde una buena borrachera, hasta la muerte de un hijo de puta reconocido internacionalmente. –Hay quién no usa esta palabra soez, lo acepto pero no me disculpo, aunque no la usen, la mayoría la ha pensado en su interior-.

De forma que siento decir que siento no sentir, no es de locos esta expresión, creo yo, tengo todo el derecho de declararme desamorado, insensible, y posiblemente cínico. Lo que no me va a hacer más ni menos feliz, no me va a convertir en mejor ni peor persona, tengo límites para la moral.

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