VIDA
NUEVA
Mascullo
entre dientes juramentos y maldiciones, ¿cómo he llegado hasta este lugar?, ¿he
sido yo el que a escogido estas ventanas, estos balcones desde donde solo se ve
soledad y angustia? Puede ser, pero lo he hecho sin pensar, sin pararme a
pensar, si es que ha sido así, porque todavía hoy, después de este ostracismo
en el que me hallo, dudo hasta de que esté respirando, debo de estar muerto y
volando por el espacio infinito, visitando lugares, posándome como cualquier
pajarillo errante, en cualquier rama que me sostenga.
¡Joder!,
lo difícil que es la lucha por no morir, por no caer en el olvido de alguien,
por no ser recordado, más que por lo que les dejas a los que te aman. Cuidado,
digo los que te aman, pero no es cierto, los que te aman, si alguien ha llegado
a hacerlo, no te lo dicen, solo aman y punto, ha medida que el cuerpo se pudre
en la tumba, menos interés despiertas.
Hoy ha llegado a mi balcón, un gorrión
pequeño, seguramente se ha extraviado, lo cierto es, que no puede volar, por lo
menos ahora, no hace más que piar, ¿de dolor, de angustia, por no saber donde
está su familia?, ve tú a saber, lo he metido en una caja de zapatos, no me
gustaría que muriera, se le ve tan frágil, tan dependiente que pienso por un
instante, que a lo mejor, todo este cúmulo de circunstancias, lo mata sin estar
enfermo.
Ha
llegado a casa Vica, mi amante, se lo he enseñado, le ha sonreído como si de un
hijo se tratara, le propongo que nos acostemos, estoy deseando estrecharla
entre mis brazos, amarla, hundirme dentro de ella. ¿Tiene que ser ahora? mira
que eres insensible. Yo no pedí que cayera en mi balcón, de todos modos, cuando
pueda volará y no se acordará de nosotros dos. No es eso, ya sé que esos
pajaritos no tienen memoria, por lo menos que conozcamos, pero es el momento en
que me lo pides lo malo, espera hombre, no te cuesta nada, la vida no se
termina en dos horas.
Me
he vestido de nuevo, estaba en pelotas, haber si de ese modo podía convencerla,
siempre se excita un poco cuando me ve. Míralo… pequeñín ¿te das cuenta como se
pone papá por una cosa así? No me toques los cojones Vica, no me vengas con
maternalismos, es un poco excesivo ¿no te parece? El año pasado nos tomamos
unos días de vacaciones en la playa; estábamos allí desnudos, haciendo el amor
detrás de unas dunas, y dos mariposas blancas se posaron juntas en unos juncos
pequeños, justo a tres palmos de donde estábamos nosotros, pues se interrumpió
el serial, y ella, ni corta ni perezosa se pone a decir… Hay míralas que
bonitas, seguro que se han juntado para hacer el amor, quieren tener
descendencia…
¡No
me jodas mujer!, ¿a que viene eso ahora? Pues sí como lo cuento, se levantó de
sobre mí, y se acerco a las mariposas que se separaron cada una por su lado,
ala, a otros dos pequeños animalitos que les ha jodido el momento. Todos
salimos mal parados de aquel incidente, yo llamándole la atención por el susto
que me dio, y las pobres mariposas, porque también les cortó el rollo.
Buena
chica lo es un rato largo, pero hombre… ya que uno pasa esas fatigas de vivir
en un cementerio, me refiero al lugar donde estoy, por lo menos ayuda a vivir a
la gente, no vengas con historias para joder la marrana… Vica es así, o la
tomas o la dejas, la han dejado ya unos cuantos, no me extraña, si vas de ese
palo por la vida, es lo mínimo que te puede pasar. Es que los hombres no me
comprenden, dice, claro que te comprenden, lo que pasa es que tú no los
comprendes a ellos. Creo firmemente, que no soy de esos, que se encierra con
una mujer todo un fin de semana en la habitación para él traca, traca, a veces
me he tropezado con mujeres de este tipo, auténticas lobas, con unos dientes
que te cagas.
Ella
tiene sus momentos, como le de por ahí, quiero decir que como sea ella la que
tenga ganas, ya pueden haber pajaritos o buitres a nuestro alrededor, pasa de
todo, dice que lo primero es lo primero. Pues ya está carajo, seamos
equitativos, objetivos, consecuentes, a no, a ella no le digas eso, porque
dice, que en su caso es diferente, que no es por las mismas razones. Pues me lo
cuente porque no lo entiendo, son las hormonas dice, entonces en el caso de los
hombres, será la bilirrubina, que quieres que te diga. Oye, y que cuando se
marcha al cabo de un par de días de estar conmigo, me parece que me falta el
aire para respirar… En el fondo, tú, estás enamorado de mí, lo leo en tus ojos.
¡Coño, mira, acabas de descubrir la sopa de ajo! ¿Tú crees, que si no estuviera
enamorado de ti, te llamaría cada día diez veces para saber como estás? vamos
hombre seamos serios.
Desde
hace un par de meses, no sé si será porque ha comenzado el invierno, viene a
casa todos los días. Dice que busca refugio de la vida que lleva, una vida
monótona, rutinaria, que está asqueada del trabajo, de los amigos, de la
familia. Hay, hay, hay, que vas a coger una depresión, y mira que no quiero a
personas depresivas a mi lado, bastante tengo yo con lo mío. ¿Qué ha sido del
gorrión? Pues que ha pasado a mejor vida, se murió. Pobrecillo, ¿lo enterraste?
Lo que faltaba, ir al campo a enterrar un gorrión, pues no, lo tiré a la
basura. Desde luego, no tienes alma cabrón. Mira Vica, la vida es así, uno se
muere y lo entierran o lo queman, un pájaro pequeño como él, va a la basura,
¿Qué querías que rezara unos padrenuestros y algún ave María?, pues mira no, yo
no sé rezar.
Ahora,
ya vive definitivamente conmigo, dice que le doy vida, una vida nueva que no
imaginaba que pudiera llegar a tener. De puta madre, nos llevamos bien, bueno a
decir verdad, muy bien, ella conoce mis debilidades y mis cualidades, yo las
suyas, no las apañamos bien. Eso sí, como se le ocurra meterse en casa
cualquier bichito ya está armada, por eso he puesto mosquiteras en toda la
casa.
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